El descanso a los veinte
La mayoría de nosotros recordamos nuestros veinte como nuestros años de formación; nos graduamos en la universidad, encontramos nuestro primer trabajo o incluso empezamos una familia…y para aquellos que están esa edad, el mundo es más exigente que nunca. Los veinte son los años en los que comienzas a desarrollarte como individuo, cuando decides la dirección que quieres que tome tu vida y probablemente el momento en el que tomas ciertas decisiones importantes (no sólo qué vas a comer al día siguiente).
Además de todo esto, cuidar el descanso es una gran prioridad. Al fin y al cabo, las noches fuera tienen un precio y la pregunta es, ¿cuántas horas de sueño necesitan los adultos jóvenes?
Cuánto descanso se necesita a los veinte
En la adolescencia, generalmente se necesitan 9,5 horas de sueño cada noche (aunque en la práctica probablemente sea alguna menos). Ahora ya no. Los adultos jóvenes a los veinte pueden pasar sin dormir tantas horas y, de hecho, los expertos recomiendan dormir entre siete y nueve horas, en función de las circunstancias personales de cada uno.
Los estudios muestran que mucha gente en sus veinte sólo duerme seis horas, sobre todo si tienen que enfrentarse a grandes desafíos cada mañana, ya sea impresionar a alguien con los estudios, avanzar en su carrera profesional o ahorrar para un gasto importante como pagar la señal de una casa. Aunque estas cosas son muy importantes, recuerda que dormir suficientes horas te dará beneficios a largo plazo, desde mantenerte sano y feliz hasta mejorar tus relaciones.
Cambios en el descanso a los veinte
Vale, ya hemos hablado de cómo a los veinte no se necesitan tantas horas de sueño como en la adolescencia, pero hay más cosas que cambian. Por ejemplo, es muy común pasar de ser un búho nocturno a un pajarillo madrugador.
Aparece nuestra faceta madrugadora
Estos cambios están relacionados con nuestro reloj biológico y las hormonas que nos indican cuándo estamos cansados y cuándo estamos listos para despertarnos. El motivo por el que a tantos adolescentes les cuesta levantarse por la mañana no es la pereza (la mayoría de las veces), sino la manera en la que funcionan sus relojes biológicos. El patrón del sueño cambia a los veinte y de gran manera. Todos somos diferentes, pero la mayoría de los adultos jóvenes experimentan un estado de alerta mayor por la mañana y mayor cansancio por las noches.
Socializar (quizá demasiado)
El “jet lag social” aparece comúnmente a los veinte y está relacionado con ese sentimiento de tener muchas cosas que hacer (sociales o profesionales), pero tu cuerpo te pide dormir. Muchos adultos jóvenes acaban durmiendo menos por priorizar otras actividades, lo que puede llevar a una falta de sueño prolongada.
Incontables hormonas del sueño
¡Buena noticia! A los veinte aún contamos con niveles altos de hormonas que nos ayudan a dormir bien, incluido el estrógeno y la hormona del crecimiento. Los niveles no son tan altos como en la adolescencia, pero siguen siendo altos durante toda la década de los veinte.
Consejos para dormir mejor a los veinte y a los treinta
Los enemigos del descanso a los veinte son las rutinas irregulares y saltarse el sueño de calidad que necesitamos. Estos son nuestros consejos para evitarlo:
- Intenta establecer una rutina realista que puedas seguir. Sabemos que no vas a beber un chocolate caliente e irte a dormir todas las noches a las 8 de la tarde, pero si te pones alguna que otra restricción sencilla y mantienes una buena rutina, verás qué beneficios tan maravillosos obtienes.
- Aprende sobre la higiene del sueño. Puedes decidir no usar el móvil después de las 10 de la noche (aquí puedes leer acerca de por qué es una buena idea), hacer un poco de meditación antes de dormir o quedar contigo mismo un par de noches a la semana para quedarte en casa y hacer algo relajante.
- Ahora ya eres un adulto ¡y te mereces una cama de verdad! Deshazte de tu viejo edredón de tus años de estudiante, invierte en un buen colchón y verás cuántos beneficios obtienes. Dormir en uno de nuestros colchones híbridos no es mala idea (y si no es para ti, tienes hasta 200 días para devolverlo y te devolvemos el dinero, sin preguntas).
¿Quieres qué te depara el mundo del sueño? Echa un vistazo a nuestras guías acerca del descanso a los treinta y a los cuarenta.